Es un poderoso antioxidante con un impacto clínico comparable incluso al de la vitamina C, no se produce en el cuerpo y no está presente de forma natural en ningún animal o planta. Sin embargo, sus efectos beneficiosos para la salud documentados rivalizan con los de cualquier otra sustancia conocida. Al igual que la vitamina C, la mayoría de los médicos no aprecian ni utilizan los verdaderos beneficios del Azul de metileno en tantas enfermedades diferentes como: Infecciones (antiséptico plasmático) desinfecta el plasma sanguíneo, retrasa el envejecimiento celular, aumenta la energía, empleado en afecciones respiratorias causadas por diferentes tipos de infección, reparación pulmonar, mejora la memoria y protege el cerebro, aumenta la serotonina (hormona de la felicidad), mejora la calidad del sueño REM, la atención y concentración. Útil en el manejo de la depresión, demencia y psicosis, útil en fatiga crónica, fibromialgia y migraña.
Composición
Cloruro de metiltioninio
Concentración: 10mg./ml.
Advertencias
No usar Azul de Metileno en pacientes que estén recibiendo antidepresivos o ansiolíticos, ya que puede causar crisis hipertensiva o síndrome serotoninérgico. Se debe suspender los medicamentos una semana antes del uso del Azul de Metileno y se puede reanudar 24 horas.
Presentación
Caja de 12 viales x 10 ml.
Protocolo
El tratamiento es por 5 semanas, se debe diluir en 500ml de solución salina y pasar por vía intravenosa de la siguiente
manera:
1ª semana, 3 ml de Azul de Metileno a 52 gotas por minuto
2ª semana, 3 ml de Azul de Metileno a 52 gotas por minuto.
3a semana, 4 ml de Azul de Metileno a 52 gotas por minuto
4ª semana, 5 ml de Azul de Metileno a 52 gotas por minuto. 5ª semana, 5 ml de Azul de Metileno a 52 gotas por minuto.